miércoles, 17 de marzo de 2010

¿Respeto?

18:45, salgo de mi casa y cuando paso por delante de la parada del autobús, veo que justo en ese instante pasa. Me vino genial, aunque ya me disponía a ir hasta el centro andando en vez de contribuir con mi euro a contaminar un poco más este mundo que nos estamos cargando, pero la verdad es que no me apetecía mucho andar sola. 



Me coloco detrás de dos señoras para entrar en el autobús, espero pacientemente a que una de ellas (que rondaría los 80 por lo menos) consiga sacar las monedas de su bolso céntimo a céntimo y mientras observo la cara de desesperación del conductor. Al final la señora agota mi paciencia y como tenía que pagar con la tarjeta de transporte, lo hice y adelanté como bien pude a la pobre señora. Cuando terminó de pagar y consiguió avanzar hasta pasar por delante de donde me había sentado, me levante y le dije que si se quería sentar (por que el resto del autobús estaba medio lleno) pero la señora creo que me ignoró en cuanto vio un asiento libre cerca de otro señor de su quinta que seguro que le daba menos miedo que yo, con mis pelos, mis piercings, tatuajes y mi cara de maldad (claro…).

Al ver que el autobús se ponía (por fin) en marcha y que me había sentado en un asiento de esos para gord@s (perdón, gente con sobrepeso), me senté de lado con los pies encima del asiento y me puse el iPod con la dulce voz de Marylin Manson. Yo creí que no molestaba a nadie, pero…

-¡Señorita!….. ¡Señorita!….

Por la cara que tenían puesta el resto de personas sentadas en el autobús creo que me llevaba llamando hacía bastante tiempo y yo no le había escuchado por culpa (gracias a ) la música.

-Perdone, ¿le importaría a usted sentarse correctamente?

En ese momento me dieron ganas de comportarme como una persona de mi edad, con piercings, tatuajes y con toda la cara de maldad que la señora de 80 años me había debido de ver, pero en vez de eso, le conteste con un educado

- Por supuesto, perdone usted

Y me senté correctamente a la vez que volvía a intentar seguir con mi música. No pasaron ni 20 segundos…

-¡Señorita!….. ¡Señorita!….
-Haga usted el favor de quitar esa sonrisa sarcástica de su cara. Creo que no le he dicho nada que no debiera y es una falta de respeto ante una persona mayor que se ría delante mía.

Y en ese momento ya tenía dos opciones: o bien ponerme a discutir con el viejo (perdón, persona de edad avanzada) y decirle que se metiera en su vida y se preocupase por intentar disfrutar de lo que le quedase de vida en vez de amargar la que nos queda a los demás (esto hubiese sido cruel, pero de verdad que tuve que contenerme para no hacerlo), o bien, lo que hice, presionar el botón de “parada” y bajarme en cuanto el autobús paró para no seguir molestando al viejo (¡es que lo era!), porque al parecer le molestaba con mis pintas, mi música, mi postura y… mi sonrisa.




En fin, esto me pasó ayer.
¿Qué hago? ¿Juzgo también a todos los viejos solo por la edad que tienen y por lo catetos que son todos, como ellos hacen conmigo? Yo podría pensar que son todos unos “viejos chochos”, que solo quieren amargar la existencia de los jóvenes que tiene la oportunidad de aprovechar su vida como no lo han hecho ellos, y que son personas con cultura en negativo. Pero sinceramente…, habrá de todo. Y dudo mucho que solo por parecer viejos físicamente lo sean también mentalmente.

Pero yo no. Yo, como llevo el pelo corto, tatuajes, piercings, los pantalones caídos, chupa de cuero, voy escuchando música y me siento de lado en el autobús, pues ya soy una delincuente juvenil sin cultura que ha perdido todo su derecho sobre cualquier persona que vista correctamente y se siente correctamente en el autobús (por no hablar de la pérdida de derechos antes cualquier persona de más de 50 años)


En fin, quizá suene a tópico pero…
                         las apariencias (a veces) engañan.

2 críticas destructivas:

I Belong To The Circle dijo...

Vaya con las personas mallores..(por no llamarlas viejas..),Tienes razon las apariencias engañan y mucho,quizas el que va mejor vestido es el malo y el que va "peor" vestido es el bueno.
Un beso :)
(K)!

Anónimo dijo...

jajajaja me dio mucha gracia lo que te dijo el viejo por segunda ocasión. Eso igual le pasa a cualquier joven que no este "adaptado a lo normal" y pues obvio ven algo diferente a ellos y desean controlarlo, dominarlo para que no los "perturbe" además de que por su edad pues ya... ¿qué cosa no les molesta? jajajaja!
pagaría por ver la "sonrisa sarcástica" dibujada en tu cara :)
En fin... re buena entrada ^^ seguire leyendote!
Un beso!
Pam~