domingo, 18 de abril de 2010

Sin molde

¿Alguna vez os habéis preguntado cómo será la sociedad dentro de diez o veinte años? 

Sí, me refiero a cómo será la gente y como se comportará cuando seamos nosotros esos que se supone que tienen que mirar por encima del hombro a la gente que tenga entonces la edad que tenemos ahora.

 
La verdad es que no sé si alguno/a de los/las que me lee tiene piercings y tatuajes, o cambia de color y corte de pelo según si se levanta de buen humor o con ganas de cambiar, pero yo soy de esas. Y últimamente me invade la duda de si algún día tendré que sucumbir ante el conservadorismo de esta sociedad y tomar la determinación de quitarme los piercings, taparme los tatuajes y enfundarme ropa “decente” (lo que mi madre llama “ser una chica normal”). 

Claro, yo cada día cuando me despierto y me siento por las mañanas delante de la televisión con mi taza de café en la mano mientras miro el telediario, no veo a ninguna presentadora ni reportera con piercings, tatuajes, ni un corte de pelo especialmente provocador. Me pregunto entonces, como serian ellas cuando tenían mi edad. ¿Habrán tenido también que dejar de ser como eran para poder acceder a un puesto de trabajo?



Pero luego me paro a pensar también: “bueno, estas mujeres por muy bien que se les hayan dado los estudios, han estudiado en la transición”, con lo cual vienen de una sociedad todavía más conservadora que la actual. Supongo que si ahora no está tan mal visto como hace veinte años el hecho de ser diferente, dentro de otros veinte quizás no sea razón de discriminación.
¿Vosotros que pensáis? ¿Creéis que algún día podremos ver abogados, periodistas, jueces, políticos, etc. con piercings, tatuajes, ropa “aconvencional”, etc.?





En definitiva ¿creéis que se dejará de criticar el hecho de ser diferente?

4 críticas destructivas:

Estela Rengel dijo...

Si por mí fuese, cada uno iría al trabajo como le saliera del chichi/nabo. Siempre pongo un mismo ejemplo: "Un/a enfermero/a no te va a sacar la sangre mejor si lleva un piercing en el labio, una cresta en la cabeza o el pelo y la cara "convencionales". Eso no determina el grado de profesionalidad ni influye en cómo haya estudiado o las notas que haya sacado."

Pero la realidad es bien distinta y soy de la que se tiene que quitar el piercing del labio para ir a echar curriculums a las clínicas privadas porque en la primera que lo intenté me miraron mal, a pesar de haberle dicho que cualquiera de los piercings que tengo me los puedo quitar o poner más discretos en las horas de trabajo. También fui la que se hizo un tatuaje en la clavícula a pesar de quererlo en la muñeca, porque en la Escuela de Enfermería donde estudié me aconsejaron que no lo hiciera, "que da muy mala imagen".

¿Soy mejor o peor enfermera que la compañera que estudió en la misma escuela que yo y viste "normal", "pijita", "hippie" o "raperilla"? Pues todas estudiamos bajo las directrices de las mismas maestras y maestros e hicimos las prácticas en sitios similares. Así que la respuesta es clara.

Parece que poco a poco la gente es más abierta a estos temas, pero mientras siga quedando gente con prejuicios, estos se seguirán transmitiendo y seguiremos viéndonos como "raros".

Una pena para ellos, saco sangre mejor que muchos de los que les ha sacado sangre en su vida. (H)

Un beso.

Unknown dijo...

La imagen, algo con lo que siempre estamos vinculados, que mas te da el llevar piercings, tatuajes, y peinados estramboticos, se supone que debemos mantener nuestra apariencia, pero sinceramente por mucho que te arregles ese alma rebelde estara en ti, ya se sabe lo que se dice, aunque la mona se vista de seda mona se queda, no nos olvidemos de lo mas importante de la persona, el espiritu, no la carcasa que lo envuelve

Blan dijo...

no sé si se dejará algún día de criticar lo diferente.. sólo sé que a los que llevan piercings, tattoos, pantalones anchos, melenas (chicos), rastas...en definitiva "pintas", también les suele (o nos suele) encantar criticar a los pijines.. el problema no es la crítica, si no que se nieguen derechos básicos por un hecho físico o una circunstancia personal sin pararse a valorar todas las demás valías de cada persona..
Eso sí, no podemos pretender que nos den total confianza cuando no hemos demostrado nada.. O acaso cuando conoceis a alguien no te haces una idea de cómo será esa persona solo por lo que ves? luego si le das la oportunidad te ratificas o cambias la primera impresión..
Pero bueno, es normal que si me ven de primeras muchas veces me pregunten si soy de prácticas.. soy yo la que tengo que demostrar lo bien que pincho y la confianza que le puedo dar al mostrar como trabajo..

Cristina Alonso dijo...

sinceramente no creo que eso posible, siempre hay alguien que criticará o discriminará a otro alguien por su forma de vestirse y arreglarse, en fin es algo practicamente inevitable...
pero bueno ojalá si hubiese cambios en ese aspecto,porque cada uno es como es y punto y le gusta lo que le gusta, no deberían existir discriminaciones,pero las hay... y seguramente las seguirá habiendo...
un beso preciosidad me encantan tus reflexiones y tambien tu!:)