miércoles, 1 de septiembre de 2010

I'm back

Creo que va siendo hora de dejarme caer de nuevo por aquí después de tanto tiempo (unos cuantos meses al menos ¿verdad?).

Al principio la excusa era que tenia que estudiar para los maravillosos examenes finales de bachillerato. Una vez superada la barrera del nerviosismo por las notas y titulo en mano, tocaba volver a coger los libros y alzar el altar del Burn y prepararse selectividad. Y después de unos días de incertidumbre por los resultados y unas horas para asimilar el aprobado, empezó todo.

El primer viaje a Madrid fue el mismo día en que supe mi nota de selectividad. Supongo que fue uno de mis pocos arrebatos de autoconfianza. Me recorrí todo Mostoles para echar las preincripciones y me reencontré con viejos amigos y sentimientos latentes.

Días después (dos) surgió una nueva escapada a Madrid, uno de esos (no sé ni muchos o pocos) momentos en los que debes pensar y sientes. Un par de días de decepción, la mejor decepción de mi vida.

Al día siguiente decidimos desconectar y acabamos cuatro amigos en Matalascañas en la típica Pensión Loli atragantandonos con risas y acaparando con ansia el sol como si nos lo fueran a robar en cualquier momento. Cinco días geniales que necesitaba.

De nuevo al día siguiente el tren me trajo a Madrid y en otra aparición de mi inexistente autoconfianza organicé todo el viaje para matricularme en la universidad sin ni siquiera saber si me habrían admitido. Diez minutos antes de salir de casa a las siete de la mañana para coger el tren confirmé que estaba admitida. Cuatro días de estrés, llantos, más desilusiones, alguna que otra alegría, una proposición interesante y nuevos sentimientos que aún hoy me siguen dibujando una sonrisa.

Directamente y sin descanso un AVE Madrid-Sevilla y el comienzo oficial de mis vacaciones a finales de Julio. Puede que una de las semanas menos aburridas que he pasado en Sevilla y quizás solo por las noches de conversaciones que nunca esperaba que acabasen. Luego un libro y trece días recorriendo Francia a veces con la unica esperanza de que en el siguiente hotel también hubiera wifi para no perder esa rutina que tanto echaba de menos cuando salia el sol.

Una noche en Paris y muchas horas de sueño empaquetadas en un vuelo a Sevilla que más tarde encerré en un autobús con destino Badajoz. Horas en casa y una maleta para encerrar esta vez un puñado de sentimientos desordenados en un autobus que me llevaría a pasar cinco días dificiles de olvidar. Un "hasta pronto" y una semana contando días para volver a sentir.



Y desde entonces estoy aquí, desde ese Domingo 22 tan esperado. En Madrid, en mi piso, rebosando aun más felicidad de la habitual y a dos días de la presentación en la universidad.



sábado, 24 de julio de 2010

Llamame loca

Y un día te verás sentada en el sofá de tu casa después de un día en un trabajo que nunca quisiste, rodeada de millones de cosas que solo compraste para rellenar físicamente los huecos que no puedes tapar en tu interior. Te pararás unos segundos a pensar en cual ha sido el momento de tu vida en que has dejado de perseguir tus sueños para rendirte ante la idea de una vida vacía. Y será entonces cuando recuerdes aquella frase de una bonita película que no volviste a ver por miedo a sentir: "La seguridad es para los que no aman".
Recordaras decenas de momentos en los que pensaste en vez de sentir solo por miedo a sufrir, cuando en realidad deberías haber cogido una bocanada de aire y saltar al vacío sin saber si seria verdad que te cogerían antes de caer.


Y entonces te acordarás de mi y de las locuras que nunca me dejaste hacer por ti.

miércoles, 14 de julio de 2010

Un día, soñando...

Supongo que todo el mundo sueña con ser algo en la vida. A veces incluso sabes como quieres que sea tu vida en un futuro cuando apenas acabas de aprender a andar.
¿Sabeis? Valoro muchisimo a esa gente. Valoro mucho a la gente que sabe lo que quiere desde pequeño y que no han permitido que el tiempo tergiverse sus sueños.

Yo algún día soñé con ser dibujante, no duró mucho en mi ese sueño. A menudo me regalaban el oído diciendome que tenia madera de dibujante, pero nunca destaqué por ello.
Un día llegó el deporte a mi vida, y desde entonces no se ha ido ni quiero que me abandone jamás. Pasé por diversos deportes, a cual mas atractivo para mi. En el que más destaqué fue en atletismo hasta el punto de participar en el Campeonato de España. En aquellos momentos estaba segura de que me dedicaría toda la vida al deporte. Mi vida como deportista profesional acabó con una lesión de rodilla ireversible
Más tarde pensé que quizás, podría ser arquitecta. Ya que no tenia la imaginación suficiente como para poder crear de la nada, podría "dibujar" planos y construir así algún día la casa de mis sueños. Mi futuro como arquitecta murió cuando me di cuenta de que el dibujo técnico era eso, demasiado "técnico" para mi.
Pronto vino a mi cabeza la posibilidad de ser informática. Digamos que no se requiere gran cantidad de imaginación para programar, y a la vez nadie podría frustrar un ápice de mi creatividad. Supongo que la imagen de verme toda la vida sentada enfrente de un ordenador no me atrajo.
Y entonces llegó ella, una profesora de filosofía que me sugirió dedicar mi vida a algo más "teórico" y donde a la vez pudiera dejar plasmada mi creatividad. Es quizás la culpable de que en pocos días me vaya a matricular de Periodismo y Comunicación Audiovisual, se lo debo de algún modo.



Y a pesar de ello, no se que quiero ser el día de mañana.
¿Mi sueño? Os lo contaré...

Sueño con una casa en algún lugar del mundo, en un bosque. Una casa de estilo moderno, con lineas rectas, decoración minimalista y luz, mucha luz. La casa no debe estar muy apartada de la ciudad, me alimento del bullicio de la gente y de las simples relaciones de miradas.
Supongo que tendré que tener un trabajo. Me veo con mi casa llena de fotos tomadas por mi en todo el mundo, sentada en mi estudio, escribiendo el articulo que mañana saldrá en el periódico más leído del país. Me veo escribiendo un libro, una novela realista quizás; y mientras escribo ya tarde, cuando solo la luz que me alumbra se distinga en la oscuridad de la casa, alguien llegue y me de un beso de buenas noches mientras me dice que me vaya a la cama, que es tarde.
Sueño con eso, y con pasar a la historia, con ser recordada. Los ideales románticos de los libros de historia tenían que dejar huella de alguna forma en mi, y así lo han hecho. No sé si quiero pasar a la historia por hacer algo grande o por ser la mejor en algo; pero me niego a que mi vida sea solo un puñado de años llenos de recuerdos que algún día todos olvidarán.



Llamadme loca, pero... no estoy aquí por casualidad. Me niego.

lunes, 5 de julio de 2010

Estupidas vacaciones

Es lo peor, te das cuenta de que llevas muchísimo tiempo centrando tu vida en algo que carece de total sentido. Pero al cabo de los segundos, llegas a la conclusión de que te da vida, de que en realidad necesitas centrar tu vida en algo, necesitas tener un objetivo. Y con los objetivos, ya sabemos lo que pasa… ¿Cuánto más inalcanzables más atractivos? No. Cuanto más atractivos más inalcanzables.

Y esa es la razón de que odie tanto el verano; para mí, carece de objetivos. El verano no es más que un puñado de meses en los que la gente espera desconectar pero que irónicamente es la época del año en la que más desastres ocurren (y entendamos “desastres” es su sentido más amplio: accidentes, separaciones, discusiones, desastres meteorológicos…). Y todo ¿Por qué? Porque la gente no tiene un objetivo más allá de simple y banal disfrute insulso de sus vidas.

Con lo cual, aquí una servidora, va a evitar seguir al rebaño y dejarse llevar por los tópicos veraniegos de desamores playeros y tiempo perdido sin sentido. Desde hoy mismo y hasta agosto (mes en el que me mude) me voy a dedicar a mí. Y dedicarme a mí, significa que voy a centrar mi vida en escribir, pintar, leer, hacer deporte y tocar la guitarra.



Aún así, en agosto retomaré inevitablemente mis antiguos objetivos. 


Son los que me dan vida…

jueves, 1 de julio de 2010

3,2, 1... ¡Acción!


¡Venga Avril, que tú (no) sabes actuar! Es solo cuestión de cambiar lo que quieres decir por lo que debes decir. Recuerda, di "Hola" cuando quieras saludarla con un "¡Preciosa!"; si te apetece decirle un "Tengo ganas de verte" diselo con un simple "¿que tal?"; y si por alguna casualidad se te pasa por la cabeza un "Te echo de menos", expresalo con un simpático aunque triste "Adiós".




Odio ser la reina del drama y tener que pensar por ello todas y cada una de las palabras que salen por mi boca para no equivocarme.


Creo que voy a hacer una locura de las mias.

lunes, 28 de junio de 2010

El comienzo

Es curioso como personas distintas pueden tener reacciones tan diferentes ante la felicidad ajena. Dos ejemplos:


Mi madre:

11:30 (en cuanto veo las notas, la llamo)
- Mamá, que ya he visto las notas de selectividad
-¿Que tal, hija?
- Bien, ¡un 9.764!
- Ala tía, que "wai" ¿no? (mi madre es que habla así). Sabia que tú podías. Estoy orgullosa de ti. Ahora a Madrid, a luchar por lo que quieres.

(Por la tarde en cuanto me he querido dar cuenta me estaba imprimiendo las solicitudes de preinscripciones para las universidades y llamando a nuestra gente de Madrid para decir que mañana voy)



Mi padre:

20:50 (supongo que se habrá acordado de que hoy me daban las notas porque lo ha visto en Facebook)
- Hola ¿que tal todo?
- Bien, aqui ando.
- ¿Y las notas? Te las daban hoy ¿no?
- Si, hoy me las han dado
- Y ¿que tal?
- Bien, un 9,764
- ¿Como? ¿un 4?
- No papá, un 9,764
- Ah, pues que bien. Ahora que has terminado ¿no sientes que has perdido dos años de tú vida? (Repetí 1º y 2º de bachillerato)

(Después de esto solo se ha escuchado por teléfono un ataque de cordura de su mujer diciendo que me dejara, que ahora era el momento de ser feliz)




Lo dicho. Gracias a todos/todas los/las que me habéis aguantado estos días de estrés e incertidumbre en los que he estado realmente inaguantable (más de lo normal).




Al fin llego a la casilla de salida de mi vida.

jueves, 24 de junio de 2010

You should be here (I should be there)

[…] porque el amor cuando no muere mata,
porque amores que matan nunca mueren. […]




Empezaré esta vez por decir que nuestro amor se podría bien considerar como inexistente. Lo nuestro (por llamarlo de alguna forma) es más bien un acuerdo entre iguales. De alguna forma ambas sabemos lo que hay dentro de cada una. Pero, a veces la mejor forma de conservar algo es no mostrarlo ¿no? Aunque eso, como dice Sabina, me mata.
Me mata porque sí, porque cuando siento algo diferente me intento aferrar a ello. Me mata porque nunca antes había tenido la sensación de no poder volver a sentir nunca nada parecido. Me mata porque solo tú consigues que la olvide, porque solo tú me ilusionas (a veces no sé con qué intención). Me mata porque… eres mi cuenta pendiente.

Necesito saber cómo va a acabar esto, cuando en realidad tengo la sensación de que nunca empezó.
Pero, no me lo digas. Prefiero descubrirlo por mi misma.

jueves, 3 de junio de 2010

Desorden mental

Ya no sé de qué color son las paredes de mi cuarto. Tampoco sé de qué color es mi pelo realmente. Adoro el caos. Me da pánico el orden. Mi llavero está lleno de hebillas de latas. Tengo posters en las paredes de gente que ni me gusta. También tengo un montón de matriculas que adoro. De pequeña era hiperactiva y sospecho que sigo siéndolo pero me da miedo que un psicólogo lo compruebe. Hay colgadas unas zapatillas viejas (pero míticas) en una estantería. Soy incapaz de dormir si la puerta del armario está abierta. En cambio puedo dormir un con poster de la niña de “The Ring” mirándome. Guardo en una caja un montón de recuerdos con la esperanza de olvidarlos al no verlos (no funciona). ¿Y ahora que?. Soy vegetariana, aunque como pescado de vez en cuando (por salud, se supone). Te echo de menos. Tengo un mueble solo con CD’s desbancados por iTunes. Siempre me levanto con el pie izquierdo (por joder). Adoro NY. No me acuesto sin lavarme la cara y tampoco empiezo el día sin hacerlo. El café tampoco es prescindible a las 8 de la mañana. Pienso que debería recoger mi cuarto (estoy en proceso). No paro de mirar a mí alrededor. Ahora pienso en lo que echaré de menos está habitación. Y ahora en lo que echaré de más esta ciudad. ¿Y si te vienes conmigo? Me encanta el dibujo de mi prima que tengo en la pared. ¡Oh dios! Mañana tengo clase. También soy hipotérmica, aunque realmente no sé si se llama así lo que sea que tengo (muchas tonterías).Que recuerdos me traen esas zapatillas. Y ¿Por qué soy un pato? Acabo de encontrar una de mis púas preferidas (¡Bien!). Un momento ¿tengo púas preferidas?. Quiero adelgazar. Tengo una televisión en mi cuarto que nunca he encendido. Acabo de recordar que he olvidado comprar incienso. ¿Pienso publicar esto? ¿Qué hace la cera del pelo en mi cuarto? ¿Y el aceite? ¿Y el agua oxigenada? Sí, creo que debería recoger un poco. Hoy es el cumpleaños de mi hermana. Durante 4 días solo seré 5 años mayor que ella. Quizás debería vender de una vez la colección de tazos de Digimon y Pokèmon. Debería dormir. Maldito calor. Un día debería probar a contar Angelina’s Jolie’s en vez de ovejas, seguro que duermo mejor.



Y luego me llaman loca…


PD: Perdonad por el desorden. Necesito cajones en la cabeza, y quizás también en el corazón.

jueves, 27 de mayo de 2010

¿Capaz o incapaz?

El mundo se me va quedando pequeño. Cada vez aumenta más en mi esa sensación de que necesito estar alojada en un rincón de tú corazón. Pero no en uno de esos rincones como ese donde tiro la ropa en mi habitación con la esperanza de que reaparezca limpia, sino en uno de esos rincones donde guardas los recuerdos más profundos. Recuerdos que quizás en algún momento decidas rescatar. Y es que cuando intentas enterrar un recuerdo (puede que solo un recuerdo de una sensación gratuitamente agradable) para olvidarlo, lo único que logras conseguir es que tarde o temprano vuelva a salir a flote; esta vez agarrado a una gran tabla llena de viejos sentimientos.


Y como siempre llego a esa encrucijada con mi corazón en la que esta vez, debo decidir si dejar a la deriva esos sentimientos con la esperanza de olvidarlos o rescatarlos definitivamente para embarcarlos en mi vida.

domingo, 23 de mayo de 2010

[Against me]

"Hay dos días en los que nunca pienso: ayer y mañana"


Y es que no merece la pena. Te paras a pensar en lo diferente que era tu vida hace unos meses y en lo diferente que puede llegar a ser dentro de unas semanas, y te das cuenta de que no merece la pena. Son dos fuerzas opuestas contra las que es imposible luchar: el pasado y el futuro. Uno, porque por suerte no sé puede hacer nada por cambiarlo y es inútil ocultarlo aunque muchos lo intenten. El otro, porque es (algo) incierto. (Siempre me ha dicho mi abuela eso de que no haga planes porque no sé ni si estaré viva)

Y ahora llego a ese punto en el que estoy encerrada entre mi pasado y mi futuro, es decir, en mi presente. Me resulta un tanto irónico que por primera vez en mucho tiempo en mi vida esté viviendo el presente y la razón sea que estoy sujeta por esas dos fuerzas que me intentan atraer cada cual con más ímpetu hacia sí.


¿Qué de que parte me pongo ahora? No lo sé. El pasado siempre tira más fuerte porque es conocido. En cambio el futuro es tan desconocido y tentador, que supongo que ganará la partida.



Quizás lo más gracioso sea que mi “pasado” son Badajoz y mis amigos (y tú, no me voy a engañar más). Y mi “futuro” es Madrid, la carrera, antiguas compañías y otras no tan antiguas. Si pienso ahora que hasta hace 6 años vivía en mi “futuro”, en Madrid, me invade el miedo de que mi futuro esté condenado a estar eternamente perseguido por mi pasado.

sábado, 8 de mayo de 2010

No time

Siento deciros que estoy de exámenes y mi tiempo para escribir es realmente reducido.

Pero prometo volver.
En cuanto consiga aprobar (o al menos eso espero) tendré mucho tiempo libre ;)

Un beso.
Y gracias a todos/as por pasaros por aquí =)



jueves, 29 de abril de 2010

Aquí no.

Creo que acabo de decidir que mañana iré con velo a clase. Si, así espontáneamente. Simplemente por comprobar hasta qué punto llega la transigencia en mi instituto.

 
Y es que resulta, señoras y señores, que estamos en un país en el que se puede acudir a clase con “shorts”, “tops”, y enseñando el tanga de hilo al más puro estilo burdel de carretera comarcal, pero no se puede llevar velo. Me pongo a pensar otra vez, en si algún día no me dejarán entrar en clase, o me arrestaran por la calle, o no me querrán vender el periódico. Porque ¿Qué me diferencia a mí de la chica del velo? (aparte del velo, claro). 



Y me resulta bastante irónico estar defendiendo la libertad de una persona que está haciendo uso de una indumentaria que no es más que un marca identificativa de su religión. Porque si, si nos habíais dado cuenta, la religión me toca la moral. (Y eso que procuro no meter en la misma frase moral y religión). Asique, desde mi humilde habitación propongo dos alternativas:
  • Libertad religiosa. Pero libertad para todas las religiones (incluso para la de Maradona)
  • No libertad religiosa-No religión. Esta, la verdad, es que me gusta más. ¡A la mierda la religión! ¿No se puede entrar en clase con velo? Vale, perfecto. Tampoco se puede entrar con la cabeza de un cristo (con minúscula porque me da la gana) de tamaño superior al cerebro del portador, en clase (esto terminaría por extinguir prácticamente la posibilidad de poder ver estas atrocidades).



La religión para lo unico que ha servido siempre es para lo que sirve ahora, para discutir.

viernes, 23 de abril de 2010

'Cause I'm so much more than meets the eye

Harta, no. Hartísima estoy de las apariencias.

Ayer fue la última vez (por ahora) de una larga lista de veces que me dicen que no soy como aparento ser.

Esto quizás no os parezca un problema. Puede que yo sea muy retorcida, pero encuentro una diferencia abismal entre no ser como aparentas ser, y no aparentar ser como eres.

La segunda opción es un poco más alentadora que la primera. Esa frase da a entender que pareces ser de cierta manera, pero que con el tiempo te acaban conociendo y se llevan una grata sorpresa.

La primera opción no es tan favorecedora. Esta da a entender que aparentas ser de una forma que a todo el mundo agrada o atrae, pero que en el fondo no eres así y se acaban llevando una decepción cuando te conocen.

(Me he explicado fatal, lo sé. Quizás poniendo mi ejemplo personal, me explique mejor)


Empiezo ya a acostumbrarme a que me digan eso de “tienes pinta de chula”. Yo me miro al espejo y no me veo pinta de chula, aunque puede que la gente vea lo contrario por culpa de la chupa de cuero, las gafas de sol, etc. Apariencias, os repito que son apariencias.

Pero ese no es el problema en realidad. El problema es que empiezo a pensar que el 99% de la gente que se ha acercado a mí en algún momento de mi vida lo ha hecho atraído/a por esa falsa fachada que ven en mi. Pues bien, os lo advierto a todos y todas: NO SOY UNA CHULA (ni quiero serlo). Ni tampoco soy la típica tía dura, lanzada, borde, que no muestra sus sentimientos, etc. No, no soy así aunque lo parezca. Siento desilusionaros.


Cualquiera que me conozca de algo más que cruzar dos palabras o verme en fotos o por la calle, os podrá decir que por suerte o por desgracia soy todo lo contrario a eso. De tía dura, tengo poco o nada, al contrario soy la persona más frágil del mundo, muy a mi pesar. De lanzada tengo menos, soy muy tímida aunque aparentemente no lo parezca porque soy muy extrovertida (tímida y extrovertida no son términos antagónicos). De borde si tengo más, eso no os lo voy a negar, pero simplemente porque soy amante de la ironía y el sarcasmo.


Asique por pavor, no os creéis falsas expectativas conmigo.


Y si os las creáis:

Siento no ser como aparento ser ¡Os jodeis!

martes, 20 de abril de 2010

¿Where is the love?

Me parece totalmente surrealista que pasen estas cosas en pleno siglo XXI.




Os pongo en situación.

Mis abuelos, hace una semana, se fueron de viaje organizado a Bruselas (si, mis abuelos viajan un montón con eso de que los viajes del "inserso" están tirados y además tienen dinero para podérselo permitir). El caso es que supuestamente deberían haber vuelto el viernes pasado y acabaron volviendo el domingo por culpa de la dichosa nube de humo expulsada por el dichoso volcán que entro en erupción. Esto es debido a que, como los aeropuertos fueron cerrados a raíz de la erupción, han tenido que volver el autobús (desde Bruselas, ¡yo alucino!).



Pues resulta (aquí viene lo que os quería contar) que tuvieron que contratar un autobús para poder volver, y claro obviamente, ese autobús había que pagarlo de alguna forma. En el viaje no solo iban personas mayores (quedamos en que los podía llamar “viejos” ¿no?) con posibles, también iban un par de parejas jóvenes y una chica de color que viajaba sola. Pues bien, las dos parejas jóvenes y la chica de la que os hablo no disponían del dinero para poder pagar el autobús en ese momento ya que eran 150€ y habían ido al viaje con “lo justo”. Además de estas cinco personas también tuvieron problemas con el pago del autobús una pareja de mediana edad compuesta por un hombre con cáncer faltando a sus sesiones de quimioterapia por culpa del retraso producido a raíz de la cancelación del vuelo de vuelta, y su mujer. Resulta que esta señora perdió el bolso con todo el dinero.

Viendo esta situación, personas como mis abuelos dijeron que no importaba que estas personas no pagasen en el acto, que a ellos no les importaba pagarles el viaje. A lo cual estas personas respondieron que no había problema porque en cuanto llegaran a España les ingresarían el dinero necesario y que además estarían eternamente agradecidos por el gesto.

Pues bien, otras “personas” (por llamarlas de algún modo educado) se negaron a que esto pasase, añadiendo perlas como:
   - Si nada mas que hay que ver la pinta que tiene
    (Refiriéndose al hombre con cáncer. Su mujer como os he dicho perdió el bolso y el pobre hombre al  estar faltando a sus citas de quimioterapia sudaba muchísimo y tenía cara de estarlo pasando mal.)
   - Yo con esa no me monto en el autobús
    (Refiriéndose a la chica de color que como os he dicho también, era joven e iba con el dinero justo)


Yo no sé a vosotros, pero a mi esta situación me parece totalmente vergonzosa. Y no solo me parece vergonzosa, sino que me parece una muestra de falta de humanidad increíble.


Primero, por la falta de empatía con personas que no tienen culpa de que hayan cancelado su vuelo que tenían pagado y no llevaran más dinero encima (a mi me hubiera pasado igual).

Y segundo (que me parece aun más fuerte), por discriminar a una persona solo por ser de color.

Yo de verdad que desconocía que aun existiese gente con este tipo de perjuicios absurdos y sin ningún tipo de fundamento. Es que estas cosas pueden conmigo. No me quiero ni imaginar cual podría haber sido mi reacción si hubiera estado delante cuando una señora dijo que no se montaría en el autobús con la chica solo por ser de color. Son ese tipo de cosas que me sacan de mis casillas, situaciones en las cuales quizás egoístamente no me quiero ver porque no se cual podría ser mi reacción.


Puede que ni siquiera nos sorprenda esto porque estéis acostumbrados/as a este tipo de situaciones. Eso querría decir que he tenido la suerte de crecer rodeada de gente educada y con unos principios mínimos.






Creo que todavía queda mucho por hacer en lo que a concienciación social se refiere.

domingo, 18 de abril de 2010

Sin molde

¿Alguna vez os habéis preguntado cómo será la sociedad dentro de diez o veinte años? 

Sí, me refiero a cómo será la gente y como se comportará cuando seamos nosotros esos que se supone que tienen que mirar por encima del hombro a la gente que tenga entonces la edad que tenemos ahora.

 
La verdad es que no sé si alguno/a de los/las que me lee tiene piercings y tatuajes, o cambia de color y corte de pelo según si se levanta de buen humor o con ganas de cambiar, pero yo soy de esas. Y últimamente me invade la duda de si algún día tendré que sucumbir ante el conservadorismo de esta sociedad y tomar la determinación de quitarme los piercings, taparme los tatuajes y enfundarme ropa “decente” (lo que mi madre llama “ser una chica normal”). 

Claro, yo cada día cuando me despierto y me siento por las mañanas delante de la televisión con mi taza de café en la mano mientras miro el telediario, no veo a ninguna presentadora ni reportera con piercings, tatuajes, ni un corte de pelo especialmente provocador. Me pregunto entonces, como serian ellas cuando tenían mi edad. ¿Habrán tenido también que dejar de ser como eran para poder acceder a un puesto de trabajo?



Pero luego me paro a pensar también: “bueno, estas mujeres por muy bien que se les hayan dado los estudios, han estudiado en la transición”, con lo cual vienen de una sociedad todavía más conservadora que la actual. Supongo que si ahora no está tan mal visto como hace veinte años el hecho de ser diferente, dentro de otros veinte quizás no sea razón de discriminación.
¿Vosotros que pensáis? ¿Creéis que algún día podremos ver abogados, periodistas, jueces, políticos, etc. con piercings, tatuajes, ropa “aconvencional”, etc.?





En definitiva ¿creéis que se dejará de criticar el hecho de ser diferente?

miércoles, 14 de abril de 2010

Ahi Puri, ¡lo que me han contado!

Antes de nada, ¡Feliz 14 de Abril a todos! A por la 3ª compañeros/as ;)



Sé que muchos/as de los/las que leéis mi blog esperáis que escribas más acerca del amor, mis reflexiones sobre mí, y esa clase de cosas que me rondan la cabeza últimamente. El problema es que creo que el hecho de ver el telediario por las mañanas me distrae de mis pensamientos habituales por culpa de declaraciones como esta de mano del señor Cardenal Bretona:
(Concretamente la he extraído de ElPais porque copiar del telediario es “complicado”)




"Muchos psicólogos y muchos psiquiatras han demostrado que no hay relación entre celibato y pedofilia, pero muchos otros han demostrado, me han dicho recientemente, que hay relación entre homosexualidad y pedofilia"






Analicemos detenidamente la declaración de este “señor” (por llamarlo de alguna forma):


"Muchos psicólogos y muchos psiquiatras han demostrado que no hay relación entre celibato y pedofilia […]”

¿Quiénes son esos psicólogos y esos psiquiatras? ¿Son muchos entonces? Pues mira que yo es la primera vez que escucho que hay relación entre la homosexualidad y la pedofilia, y en cambio he escuchado numerosas veces (a las pruebas me remito) que existe una fuerte relación entre en celibato y la pedofilia. Y el celibato no solo está relacionado con la pedofilia, sino con numerosos trastornos psicológicos (como la esquizofrenia paranoide) desencadenados por la privación de libertades (teóricamente) durante toda una vida.





“[…], me han dicho recientemente […]”

Resulta que al señor Cardenal de Bretona, quizás mientras que compraba el periódico o esperaba en la calle su coche conducido por su chofer personal, le ha dicho “alguien” que la homosexualidad esta relacionada con la pedofilia.
Me pregunto si nos seguirá manteniendo al corriente de todos los chismorreos vaticanos. Quizás ha llegado el momento de hacer un “Sálvame” versión clerical. Ya lo veo, ya lo veo…


-Y hoy en “Sálvame del infierno” tenemos a…. ¡el Cardenal Bretona!
(La gente aplaude y esas cosas que les obligan a hacer por un bocadillo)
-Buenas tardes Sor Mentira (esta sería la presentadora).
- Cardenal de Bretona, buenas tardes.
- Sor Mentira y demás colaboradores, tengo fuentes muy fiables que me han comunicado una exclusiva. Me ha dicho la vecina del peluquero de la mujer del hijo del sobrino de mi antiguo compañero de seminario que el cuñado del Papa (la forma correcta de entonación seria “el Paaaaaapaaaa”, es para darle énfasis, no sé, en estos programas lo hacen así) ha metido mano en el cepillo de la Iglesia a la que acude también la mujer del hijo del sobrino de mi antiguo compañero de seminario.
-Pero ¡qué fuerte esto que me dices!, Cardenal.

(DRAMATIZACIÓN)




“[…] hay relación entre homosexualidad y pedofilia"

Y claro que hay relación, ¿no te jode? Si tenemos en cuenta que los curas seminaristas, por ejemplo, se pasan la vida rodeados de niños varones…. ¿con quién coño van a ejercer la pedofilia si no es con ellos? (y perdonad mi lenguaje pero es que me tocan la moral).
Pero es que no es como el Cardenal Bretona quiere hacernos ver. La pedofilia no es consecuencia de la homosexualidad. Y si así fuera: señoras y señores, la iglesia católica está plagada de homosexuales (ya que está plagada de pedófilos). En este caso también, al ser la homosexualidad la raíz del problema, ser considerada por esta gentuza como una enfermedad, y ser la pedofilia un delito… ¿Hay reducción de pena por ser homosexual pedófilo?, no sé, como es por culpa de una enfermedad… Y ¿son todos los gays pedófilos?, porque mira que yo solo he oído hablar de la pedofilia homosexual en la iglesia católica.




Queda claro que este" grupejo" de impresentables se dedica a intentar tirar balones fuera creando nuevos temas de conversación que les permitan resultar impermeables ante la que les está cayendo. Pero, queridos (si, ya…) miembros de la iglesia católica, este tipo de declaraciones lo único que provocan es que intentemos desmontar aun mas minuciosamente y con mas entrega, este circo que hace siglos que tenéis montado.


No tenéis vergüenza, ni la conocéis. 
(Como me diría a mi mí madre)



Solo espero que toda esta trama histórica sirva para que esta generación y las futuras, traten de desvincularse cada vez más de la iglesia y comprendan que lo único que traen y han traído siempre son problemas.

sábado, 10 de abril de 2010

¡Qué paren ya!

Acabo de estar leyendo, hace unos cinco minutos, un articulo en uno de esos blogs que te “deja” El País publicar en su web, supongo que tras comprobar que tienes algo de “arte”.
He de reconocer que tenía ganas de escribir algo pero no sabía el que. Asique, como normalmente la inspiración viene leyendo el periódico, y hoy no tengo periódico (aún), he pensado en visitar la web de El País en busca de inspiración.
No me he encontrado con tal fenómeno, pero al menos he leído algo interesante.

Este articulo habla sobre el impacto ecológico que supone la ingesta de carne diariamente.
Lo siento, algún día os tendría que tocar escuchar mis charlas sobre ecologismo y notar que os estoy intentando convencer de algo que no os habíais planteado en la vida.

Obviando el sufrimiento animal que conlleva el matar un ser vivo para comérselo, no sé si sabréis que el ganado es una de las mayores causas de pérdida de fauna y flora en el mundo. Esto se debe a que, como animales que son, comen y “defecan”.
¿Qué efectos tiene que coman? (Y no es que coman, que todos lo hacemos, es que… comen mucho) Una ganadería es capaz de ingerir hectáreas de pasto (no el mismo día, claro), así como cualquier tipo de planta que se tope en su camino. Esto provoca una perdida importantísima de flora.
¿Qué efectos tiene que defequen? Pues, estos animales son unos de los principales emisores de CH4 en el mundo. Representan un 10% de las emisiones de gases de efecto invernadero, según he podido leer en este articulo.


Y ahora estaréis pensando: “Avril, pero ¿tú no defendías a los animales?, parece que los quisieras matar por ser culpables de los desastres medioambientales.”. Y efectivamente los defiendo.

La solución sería, en mi opinión, disminuir la producción de ganado. Y para ello, sería necesario disminuir también el consumo. (Ley de la oferta y la demanda)
Y aquí es donde os empiezo a “soltar la charla”.
¿Vosotros sabéis lo que os estáis metiendo en el cuerpo?
Entre otras cosas, como hormonas y demás químicos, proteínas en exceso. Un hombre de una edad entre 20 y 39 años debería ingerir 54 gramos de proteínas diarias y una mujer de la misma edad 41 gramos. ¿Cuánto ingiere un español de media? 93, 5 gramos de proteínas. Esto es casi el doble de lo necesario.
Se propone por lo tanto, renunciar al menos a la carne una vez por semana.

Yo os propongo algo mejor, o quizás más radical (ya me conocéis…). Probad a estar al menos un mes sin comer carne. Al cabo del mes, analizad como os sentís. Aparte de posiblemente más débiles si no habéis sustituido correctamente las fuentes de proteínas (¡hacedlo!), os daréis cuenta de que os ponéis enfermos en muchísimas menos ocasiones, os sentís con más vitalidad, etc.… Y además, si sois al menos un poco éticos, os daréis cuenta de que habéis contribuido a salvar a seres vivos iguales que vosotros de una muerte segura y además habéis contribuido también a una pequeña mejora del medio ambiente.

No os diré más, que no os quiero aburrir. Esta habrá sido sin duda la entrada más aburrida escrita por mí que habéis leído. Quizás también la peor escrita. Pero, como ya os he dicho al principio, nadie se libra de esta charla ;)


Pensároslo, por favor. Os aseguro que no cuesta nada dejar de ingerir carne animal y se contribuye muy positivamente con los animales y el medio ambiente.



miércoles, 7 de abril de 2010

¿Y tú de que marca eres?

¡Y yo que pensaba que eso de los parches en los pantalones ya no se llevaba!

En momentos así, te das cuenta de lo absurdas que pueden llegar a ser las modas. Yo concretamente, me he dado cuenta al ver hoy a un chaval por la calle, con parches en las rodilleras de los pantalones. Recuerdo que mi madre me los ponía cuando era pequeña porque como era un trasto (tengo que reconocerlo) acababa con la ropa nueva en cuanto salía a la calle.
Pero aquello... eran los 90.


Ahora esas cosas ya no se llevan. Ahora lo que se lleva son las marcas, las ostentaciones, aparentar ser más que los demás. Pero no aparentarlo por medios intelectuales, claro. Eso es ser empollón, "freak", antisocial, raro... Lo que se lleva es comprarse ropa con el logotipo de la marca lo más grande posible para que así el resto de la manada sepa "quien manda". Y me parece tan triste...

Luego me sorprende que me intente dar lecciones de moral y me hable de la explotación infantil, el maltrato animal, la esclavitud..., una persona vistiendo ropa fabricada por niños en talleres clandestinos de Indonesia (confieso que hace dos semanas me compré una camiseta "Nike", en contra de todos mis principios. Supongo que al menos soy consciente de a la clase de empresa que "subvencioné" con mis míseros quince euros)




Yo misma me tendría que aplicar mis propias lecciones, pero a veces pienso que nos deberíamos parar un rato a pensar que compramos, de donde viene, quien lo fabrica y si nos estamos cargando el mundo comprándolo.


Y no, no voy a empezar con mis monsergas sobre la insalubridad de la carne, la de la leche, el maltrato animal y el ecologismo. Eso para otro capítulo.

martes, 6 de abril de 2010

SE BUSCA

¿Alguna vez os habéis parado a pensar cuanta gente interesante ha pasado por vuestra vida?

No me refiero a un amigo, vuestro padre, vuestra abuela, el perro... Me refiero a esa clase de personas que quizás por cualquier circunstancia no se quedan en vuestra vida para siempre (casi ninguna lo hace), pero que siempre que echáis la memoria atrás (creo que hacia delante no se puede) recordáis alguna conversación con ella.

Creo que por mi vida han pasado realmente pocas personas así. 


Uno de mis grandes defectos (o virtudes) es que me encanta hablar, así como escribir; asique no hay nada que me guste más que una buena conversación. Me encantan esas en las que terminas hablando de algo totalmente diferente al tema inicial de la conversación, y esas en las que te sientas a hablar con una cerveza en la mano y al cabo del tiempo, una de dos, o se te ha calentado la cerveza o te has bebido media reserva sin ni siquiera darte cuenta.


Supongo que para poder mantener conversaciones así, no hace falta ser inteligente, ni listo, ni saber sobre política, economía ni ninguna otra sección del periódico. Creo que solo hace falta tener curiosidad. Igual la forma más "fácil" y entretenida de aprender es hablando... (parece un anuncio de "Erase una vez...").



Me fabricaré una camiseta:


SE BUSCAN CONVERSADORES/AS

lunes, 5 de abril de 2010

Confieso. Ayer... vi "La Noria".

Para los que como yo, hayáis llegado en algún momento de vuestra vida a la conclusión de que ver la Tv "es caca", os comento que este es uno de esos programas en los que se dedican a "hablar" (por llamarlo de alguna manera) de la vida gente que se hace llamar "famosa" (me plantea cierta curiosidad el pensar en que organización mundial decide quién es famoso y quien no lo es). La estructura de este tipo de programas suele ser la siguiente: un presentador (tiene que ser gay, sino no hay "share"), una serie de "colaboradores" (entre ellos tiene que haber al menos un periodista de carrera frustrada y tres o cuatro famosos cansados de que hablen de ellos y con ganas de hablar de los demás) y un público (cuya media de edad no puede ser inferior a los cuarenta años, dado entre otras cosas a que la gente menor de esas edad tiene mejores cosas que hacer los fines de semana por la noche).

Como comprenderéis, no vi el programa por voluntad propia. Me hayo en el apartamento de la playa de mis abuelos: una habitación (somos cinco). Con lo cual no tenía mucha opción de hacer otra cosa aparte de jugar a la PSP de mi hermana mientras escuchaba el programa este, ya que cuando estoy aquí, duermo en el sofá-cama del salón.



Pues bien, este programa, lejos (muy cerca) de ser el típico programa "del corazón" (¿a qué coño vendrá este nombre?), tiene una sección que podríamos llamar: política. Y digo que la podríamos llamar así, por que sientan a tres personas "de derechas", a tres personas "de izquierdas" y a un moderador (el mismo moderador que se dedica a moderar las "choni-batallas" entre famosillas), y... debaten. Y en estos momentos creo que miles de españoles nos preguntamos porque seis personas que se han pasado la vida estudiando y que tienen un nivel de cultura medio-alto (o al menos eso parece) se sientan en un programa así. (Añadamos estos a los "grandes enigmas de la humanidad")

Ayer, en esta sección, trataron el tema de un "individuo" del que leí algo hace ya tiempo en el periódico. Un "señor" que decidió arriesgar valientemente su vida por defender a una mujer a la que presuntamente estaban maltratando y que más tarde acabo siendo él el maltratado y entró en coma (Versión épica).

No voy a decir que me gustaría que este ser no hubiese salido del coma. Y no lo voy a decir por dos razones: la primera es porque no me parece ético, y la segunda es porque en ese caso el otro hombre (el agresor) seguiría en la cárcel.

Este individuo, más fascista qué "el enano", se ha dedicado aprovecharse y vender su historia. De tal forma que incluso le han otorgado una medalla, le han convertido en un héroe, y es el presidente de una asociación de la defensa de la mujer maltratada (todo esto gracias a nuestra amiga Espe). Os preguntareis entonces porque hablo así de él, con tanto desprecio. Pues bien, este señor es un fascista de mierda (se puede decir mierda aquí ¿verdad?), ha llegado a decir que llevamos treinta y tres años con un sistema político absurdo (clara critica a la democracia y defensa del franquismo), y ha escrito un libro (cuyo título no recuerdo) del mismo tema. Y ha salido además en varios programas (Intereconomia, COPE, etc.) aplicando al presidente del gobierno adjetivos como: incapaz, tonto, imbécil, impotente, etc.

¿Sabéis lo que pasaría si estos hechos se hubieran dado en Alemania en vez de en España, y este señor se hubiera referido al nazismo en vez de al franquismo? Yo os lo digo: pena de cárcel. Y ahora me diréis... ¡libertad de expresión!... ¡libertad de expresión!!Y una mierda¡ O todo o nada. O dejas que la gente vaya por la calle con banderas franquistas, la esvástica, cantando el "cara al sol", camisetas de "I love ETA" y demás salvajadas, y además permites que individuos como este y otros tantos (Losantos, Pedro J, Alfonso Rojo...) divulguen sus "ideas"; o no permites ninguna de estos atropellos. Pero, o una cosa, o la otra. No porque seas un personaje mediático y tengas una cadena de radio, televisión o un partido político te otorguen libertad de expresión; y si divulgas las mismas ideas de forma personal, no este permitido. Es decir, el señor del que os hablaba puede decir públicamente estar a favor del franquismo pero una "persona" no puede ir por la calle con una bandera con "el aguilucho". Un señor (no recuerdo su nombre, pero me cae bien) puede salir en la tv declarándose antimonárquico, pero yo no puedo salir a la calle y quemar la foto del Rey. Se permite que alguien defienda el franquismo, y en cambio se condena a los etarras (a veces me pregunto qué es peor).



Libertad de expresión.
¿Para quienes? ¿Hasta dónde? ¿Hasta cuándo?

martes, 30 de marzo de 2010

Otherside

He decidido, hablando técnicamente, separar el trabajo de la vida personal. Aunque teniendo encuentra que por trabajo me estoy refiriendo a esto que leéis y por vida personal, a mi monótono día a día; creo que me va a resultar imposible.
(Por intentarlo que no quede…)

Lo que intento decir es que me he (esto creo que está mal dicho, corregidme) creado un nuevo blog. Lo he creado con la esperanza de, como ya os digo, tener un espacio donde poder escribir "a mis anchas" (sí, aunque os parezca raro yo no hablo como escribo aquí).

Asique, quienes paséis por aquí buscando enteraros de mis amoríos, problemas y alegrías, os recomiendo que ahora os dejéis caer de vez en cuando por aquí: chicainterrumpida.blogspot.com/
Por el contrario, los que disfrutéis con mis divagaciones diarias, que por otra parte también son sobre esto a lo que suelo llamar vida, seguid visitándome aquí, que aquí seguiré.

domingo, 28 de marzo de 2010

Semana Santa (¡Jáh!)

Señoras y señores, la Semana Santa ha llegado. Y al contrario de como os puede parecer, esto no significa solo vacaciones, no. La Semana Santa implica incesantes sonidos taladrantes y mentes insulsas siguiendolos.
Además, pensad, ¿cuál sería el último sitio donde una atea comunista y anticlerical querría estar en Semana Santa?

Efectivamente, aquí estoy, en Sevilla. Gran cuidad, sin duda, donde se viven estas fechas de forma especialmente emotiva (y graciosa). Me parece increíble la importancia que miles de personas le pueden dar a un trozo de madera y alambre vestido con un traje que podría quitar el hambre a cien poblados africanos. Me parece increíble lo contrario que es todo esto a lo que se supone que un señor predicó hace miles de años y en lo que se supone que se rige toda esta gente. A veces, de verdad, pienso que lo único que siguen es eso de "el pastor y las ovejas". Porque es lo que me parecen todos, un puñado de ovejas que siguen al rebaño. Y como no podía ser de otra forma, esto me recuerda a una más que magnifica canción de un mucho más que magnifico cantautor:



Sin prisa pero sin pausa,
como el "calabobos",
desde la más tierna infancia
preparan el cebo:
"Si no te comes la sopa
te llevará el coco..."
"Los tocamientos impuros
te dejarán ciego...".


Y te acosan de por vida
azuzando el miedo,
pescando en el río turbio
del pecado y la virtud,
vendiendo gato por liebre
a costa de un credo
que fabrica platos rotos
que acabas pagando tú.


Son la salsa
de la farsa.
El meollo,
del mal rollo.
La mecha
de la sospecha.
La llama
de la jindama.


Son el alma
de la alarma,
del recelo
y del canguelo.
Los chulapos
del gazapo.


Los macarras
de la moral.


Anunciando apocalipsis
van de salvadores
y si les dejas te pierdes
infaliblemente.
Manipulan nuestros sueños
y nuestros temores,
sabedores de que el miedo
nunca es inocente.


Hay que seguirlas a ciegas
y serles devoto.
Creerles a pies juntillas
y darles la razón
que: "El que no se quede quieto
no sale en la foto..."
"Quien se sale del rebaño,
destierro y excomunión".


Sin prisa pero sin pausa,
esos carcamales
organizan sus cruzadas
contra el hombre libre
más o menos responsable
de todos los males
porque piensan por su cuenta.
Sueñan y lo dicen.


Si no fueran tan temibles
nos darían risa.
Si no fueran tan dañinos
nos darían lástima.
Porque como los fantasmas,
sin pausa y sin prisa,
no son nada si les quitas
la sábana.

Los macarras de la moral. Joan Manuel Serrat


Seguid así. Seguid dificultando el progreso. Seguid siendo el pastor que domina el rebaño. Seguid inculcando el miedo. Seguid acaparando bienes materiales. Seguid interviniendo en la política. Seguid vendiendo un cuento de niños que ya ni los niños se creen. Seguid, seguid...

...que cada vez sois menos.

miércoles, 24 de marzo de 2010

Deep feelings

Estúpida sensación de que me falta algo pero no sé que es. De que tengo que hacer algo, pero no sé donde, ni cuándo ni exactamente el que. Como si por un instante todo el mundo se parase y mi cabeza se centrase solo en intentar descubrir "que", "cuando" y "donde".

Y empiezo a tener mis conversaciones internas de futura esquizofrénica bipolar (las dos cosas) y me doy cuenta de que te echo de menos. Esto me supone un gran problema, pero hay otro mayor. No sé quién eres.
Echo de menos un abstracto, una sensación quizá. Y a veces ni siquiera eso lo tengo claro. A veces pienso que lo único que echo de menos es tener algo que me ronde por dentro y que me haga los días más cortos. Porque soy como una incompleta e infantil niña de cinco años. ¿No recordáis cuando teníais cinco años? Los días se hacían larguísimos (sobre todo los anteriores a Navidad, cumpleaños...). A mí me pasa lo mismo. El tiempo pasa demasiado lento. Y por eso necesito tener algo en lo que pensar o simplemente hacer eso que se nos da tan bien a todos de contar días, horas, minutos... Al fin y al cabo es la mejor forma de no darte cuenta de que pasa el tiempo y a la vez mantenerte con la (absurda) esperanza de que ese momento está cada vez más cerca.



Necesito algo en lo que pensar. Y tú no eres la mejor opción.


(Qué bien se me da [intentar] auto convencerme)

lunes, 22 de marzo de 2010

Eterna obsesión



Otra vez ese sonido. Ese retumbar de las ventanas estremecidas ante el paso cercano de los coches. Inquietante. Cómo si solo cuatro paredes no fueran capaces de salvaguardar mis hombros. Recuerdo cómo mi padre me decía que eran la parte más importante del cuerpo. Las palabras de un viejo judoca. Recuerdos, me invaden miles de imágenes como si de los fotogramas de una película se tratase. Recuerdo la lluvia, su sonido. Y aquel patio, como me gustaba aquel patio. El olor del aire impuro, sentía como contaminaba todo mi cuerpo.  Pero, como echo de menos ese aire.
Aquella luz inconfundible, el Sol, las alturas, la gente, las risas, los llantos… Los días en que sabía que venían mis abuelos de visita son inolvidables. Siempre la misma sensación, la misma vergüenza infantil al verlos por primera vez después de muchos meses sin abrazarlos. El día de Reyes. La nieve, una enorme plaza infestada de pequeños puestos con luces y un paisaje teñido del rojo y blanco de la Navidad. Sigo sin ser capaz de dejar de emocionarme al recordar aquella sensación en la que el sonido de las melodías navideñas se perdía entre el bullicio de la muchedumbre. 
Aunque sin duda, lo que más recuerdo de aquel sitio, son las luces. Las vueltas a casa pasando por aquella calle interminable, mirando siempre bien alto, mirando al cielo. Oscuridad que se veía precisamente perturbada por aquellas luces cuyo recuerdo me sigue inquietando. Una hilera perfecta de destellos que dibujaban mágicas esferas en el camino. Y luego venia el túnel, la carretera, el sonido de los coches de nuevo y… nada. Cerraba los ojos.
Como añoro aquella cuidad. Benditos trece años.

domingo, 21 de marzo de 2010

Geografía avanzada

"La geografía marca el destino"


O algo así dijo Joey (Katie Holmes) en un capitulo de Dawson Crece.
Siempre adoraré esa serie por esto, estas frases que me hacen pensar. Y lo mejor de todo es que van pasando los años y cada vez me enseñan algo nuevo. Sí, soy una especie de persona autodidacta que aprende solo escuchando una frase y repitiéndola una y otra vez en su interior hasta que la exprime tanto que ninguna de los insignificantes signos de la que está compuesta le guardan ningún secreto oculto.


Y esta frase me hace pensar en muchas cosas.

Supongo que cuando Joey dijo esta frase, únicamente pensaba en lo que piensa cualquier persona de mi edad (¿cómo podemos ser tan imbéciles?), en el amor. Sí, señoras y señores, el amor está totalmente condicionado por la geografía. O sino probad a enamoraros de alguien de... no sé, Australia, por ejemplo (no se me ha ocurrido otro sitio que esté más lejos). El amor no conoce distancias, claro que no, pero las personas sí. No somos tan afortunadas por desgracia y aunque estemos en el año 2010, a nadie se le ha ocurrido aún la maravillosa idea de inventar una maquina de teletransporte o hacer descuentos en los medios de transporte para enamorados (esto suena bien y todo, igual me roban la idea). En fin, conclusión número uno: el amor está condicionado por la geografía.

Dejémonos de superficialidades (el amor es una superficialidad y punto) y pensemos en cómo puede marcar la geografía nuestro destino, o más bien nuestro futuro, desde el punto de vista del lugar donde nazcamos. Todos los que me leéis (que sois pocos, pero se agradece) vivís con unas "comodidades" mínimas. O al menos eso deduzco del hecho de que me podáis leer, eso ya desvela que al menos tenéis internet, que no es poco. Supongo también que ninguno (o casi ninguno) os habréis ganado por ahora lo que tenéis (ni yo ¿eh?) con lo cual deduzco además, que el hecho de que podáis estar ahora mismo leyéndome con vuestra pantalla del ordenador enfrente se debe a que habéis tenido la suerte de nacer en una familia digamos que "normal" (odio este término por su abstracción, pero es para que me entendáis).
Ahora bien, hay niños en el mundo que no tienen esa misma suerte. Os pondré en una situación bastante grafica. En Sao Paolo existe un "muro" (por así decirlo) que separa la zona más rica de la cuidad de la más pobre. Es impresionante poder ver esta imagen desde el cielo, porque es apreciable como a 20 metros escasos de uno de los bloques de aparta hoteles más lujosos de la cuidad se encuentra un poblado de "chabolas". Pensad ahora en lo siguiente, imaginaos que antes de nacer todos estamos metidos en un enorme saco y que por así decirlo, nos van repartiendo al "tuntún" por el mundo, dejándonos en manos del azar, con la esperanza de que en vez de caer en el poblado de chabolas, caigamos 20 metros más atrás. Se trata de la diferencia entre convertirte si naces hombre en un asesino o un ladrón y si eres mujer y tienes mala suerte en prostituta, o convertirte en poco menos que el dueño o la dueña de medio Sao Paolo. Desgarrados ¿verdad?
Pues sí, una vez más, queda demostrado que el futuro también queda condicionado por la geografía.



Y si el amor, quizás lo más ansiado y perseguido por la raza humana desde que existimos; y nuestro futuro, la diferencia entre "ser y no ser", están condicionados por la geografía, ¿qué podemos hacer?, ¿luchar contra un puñado de kilómetros? o ¿asumir que el buen día que nacimos nos arrojaron al lugar equivocado?...



Luchad. Luchad y buscad vuestro sitio. Al fin y al cabo los kilómetros son solo eso..., diez absurdas letras.